1. Escucha la sabiduría de tu cuerpo, que se expresa por señales de comodidad e incomodidad.
Cuando elijas cierta conducta, pregunta a tu cuerpo que siente al
respecto. Si tu cuerpo envía una señal de inquietud física o emocional,
ten cuidado. Si tu cuerpo envía una señal de comodidad y anhelo, procede.